
Beato Jordán de Sajonia, nació hacia 1190, presbítero y teólogo alemán, sucesor de Santo Domingo de Guzmán que trabajó incansablemente por extender la Orden Dominicana. En el viaje que hizo a tierra Santa en 1237 para visitar a sus frailes, pereció ahogado en el viaje de vuelta al sufrir un naufragio. Su cuerpo apareció arrojado por las olas en la playa en San Juan de Acre.